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Quizás hayas notado que al ingresar a tu ordenador, el disco duro principal al que accedes se denomina “C:”. De hecho, si agregas otro disco, seguramente se le asignará la letra “D:” y así sucesivamente. 

Ahora bien, te preguntarás ¿por qué no existen las letras A o B? ¿Y por qué el disco duro principal de la PC, incluso si es un SSD, siempre se le asigna la letra C? Tancra.

En este breve artículo intentaremos explicar las razones detrás de esta ausencia de letras en tu ordenador y el motivo de este salto, además de comprender por qué el disco duro siempre recibe la designación de la letra C.

El enigma de la letra C en los discos duros: ¿Por qué es tan prevalente?

Como sabrán, las letras “A” y “B”, que solían ocupar un lugar destacado en los sistemas informáticos, han dejado de existir en nuestros ordenadores. 

¿Pero cuál es la razón detrás de su desaparición? Si eres de los que recuerda los antiguos días de los disquetes, estarás familiarizado con estas letras asignadas a los dispositivos de almacenamiento.

Por lo tanto, es clave saber que en los primeros modelos de ordenadores, como la legendaria “IBM” PC de 1981, que operaba con el sistema operativo “DOS”, los discos duros rígidos aún no eran compatibles. 

Al parecer, estos equipos solo disponían de dos espacios para disquetes, a los que se les asignaba la letra A y B, respectivamente. Tancra.

Fue recién en 1983, con la llegada de la IBM XT, cuando Microsoft se vio en la necesidad de añadir una nueva letra a sus sistemas. Esta fue la primera PC en incluir un disco duro, aunque con una capacidad limitada de solo 10 MB. 

A partir de ese momento, la letra “C” comenzó a utilizarse para identificar el disco duro principal.

Con el paso del tiempo, la comodidad de contar con un almacenamiento interno en los ordenadores y la creciente capacidad de los discos duros, a diferencia de los disquetes que solo podían almacenar 1.44 MB, llevó al declive en el uso de los disquetes. Como resultado, cada vez era más común ver la letra C como única designación para el disco duro principal.

El final de los disquetes y las letras A y B.

Debido al desuso de los disquetes, las letras A y B desaparecieron de nuestros ordenadores con Windows de manera permanente. Aunque puede parecer extraño, Microsoft no ha optado por cambiar esta convención, ya que existen aún algunos usuarios en todo el mundo que utilizan PCs con disquetes.

Por consiguiente, modificar las letras ahora causaría un caos innecesario, dado que muchas rutas de programas están diseñadas para buscar la unidad C como raíz. 

Asimismo, sin mencionar que resultaría en una curiosidad incómoda para aquellos usuarios que están acostumbrados a la asignación de la letra C. Tancra.

Ahora bien, es clave saber que esta peculiaridad se aplica únicamente a Windows. Otros sistemas operativos como MacOS o Linux son independientes y no se basan en las convenciones de letras de Microsoft. De hecho, Apple advierte en su sitio web que cambiar o eliminar la letra asignada a la partición de Mac OS X mientras se ejecuta Microsoft Windows puede causar fallos.

Ahora que conoces el motivo detrás de la presencia constante de la letra C en los discos duros de los ordenadores con Windows, es natural preguntarse si algún día veremos un nuevo tipo de almacenamiento que reemplace a los discos clásicos, lo que conllevaría la desaparición de la letra C en nuestras máquinas. 

Por ahora, solo podemos especular y esperar a ver qué depara el futuro. ¡Una curiosidad fascinante, sin duda!

(S.M.C)